Publicado: 01/10/2020

La pandemia de COVID-19 ha cambiado drásticamente
la dinámica en el sector de procesamiento de alimentos y la situación continúa siendo inestable. El confinamiento y otras restricciones implican que, cada vez más, las personas cocinan sus propias comidas y comen en casa. Esto ha generado un rápido cambio en la demanda del consumidor a favor de ciertos tipos de productos comprados en las tiendas de comestibles. Estos cambios en los hábitos de consumo y, en consecuencia, en la producción de alimentos, tienen repercusiones para la fuerza laboral y sus sindicatos (por ejemplo, empleo, trabajo precario y negociación colectiva).

Es importante examinar las tendencias en el procesamiento de alimentos durante la era COVID-19 y si éstas indican cambios a largo plazo y lo que significan para los sindicatos. El 29 de septiembre, Héctor Morcillo, de FTIA, afiliada de la UITA, informó sobre la situación en América Latina durante una reunión virtual del Grupo Directivo de Procesamiento de Alimentos de la UITA. Puede leer su intervención en el sitio de Rel-UITA aquí.